A partir del 31 de marzo de 2023 será obligatorio el uso de la contraseña única para validar la identidad de los usuarios cuando contraten una línea adicional, repongan su chip o cambien de titularidad de un servicio móvil, según lo indicado por el Organismo Supervisor de Inversión Privada en Telecomunicaciones (Osiptel).
¿En qué consiste la contraseña única?
Es una clave exclusiva que, una vez obtenida, puede ser personalizada y utilizada para realizar trámites del servicio móvil. Además, según Osiptel, funciona como un mecanismo adicional de seguridad a la verificación biométrica de huella dactilar.
¿Cómo obtener la contraseña única para trámites de servicio móvil?
De acuerdo con Osiptel, las empresas operadoras están obligadas a entregar la contraseña única al momento de la contratación del servicio o en cualquier otro en el que la identidad del abonado sea validada a través del sistema de verificación biométrica.
Cada empresa determina la extensión y las características de la contraseña única. Por ejemplo, los usuarios de Movistar podrán usar 6 caracteres numéricos; mientras que los de Entel, de 6 a 8 caracteres numéricos. Por su parte, los usuarios de Claro pueden optar por una clave alfanumérica de 8 a 12 caracteres; y los de Bitel, de 6 a 12 caracteres alfanuméricos (incluye símbolos).
Cabe mencionar que el personal de atención de las empresas operadoras no deben tener acceso a la contraseña única de un usuario “bajo ninguna circunstancia”.
En caso un usuario no reciba la contraseña única al momento de contratación de un servicio, podrá reportar su caso a Osiptel “para evaluar las acciones a ser adoptadas y gestionar la entrega de su contraseña”, señaló Muente